Hoy vuelvo a escribir en este blog, después de mucho tiempo, porque la ocasión lo merece. Toca hablar de la cantante del momento: Aitana Ocaña.
Octubre de 2017. Tras años guardado en algún cajón, vuelve el programa de televisión Operación Triunfo. Y, con él, 16 jóvenes con ganas de aprender, convivir, disfrutar y formarse como cantantes. Recuerdo ver la primera gala con mucha expectación. Volvía uno de mis formatos preferidos. He de reconocer que, salvo la canción inicial de la espectacular Mónica Naranjo, poco más me llamó la atención... hasta que llegó ella: la chica del flequillo, Aitana. Pues bien, la catalana me dejó pegado al televisor. Esa luz, ternura, belleza, elegancia y, por supuesto, voz eran dignos de admirar. Semana a semana me fue conquistando y me “enganché” al concurso. Poco a poco, me fui convirtiendo en su fan. Como si tuviera 15 años... pues igual. ¡A mis 40! Me da igual. Aitana brillaba sobre los demás.
Cada canción que defendía en las galas era mejor que la anterior. Constantemente recibía los halagos del jurado y su sueño continuaba vivo... Un sueño que ya era también el de muchos de sus seguidores. No destacaba por sus dotes como bailarina, pero su voz era diferente: joven y madura a la vez; lo suficientemente rasgada para sonar perfecta. Cuanto más iba descubriendo su carácter, mejor me caía. Votaba todas las semanas para que saliera elegida favorita y permaneciera en el concurso. Ya no era Aitana; era mi Aitana. Cuantas noches de alegrías, de risas, de actuaciones memorables me has dado. Y, por qué no decirlo, me hiciste sufrir porque no ganaste. Y sí, Aitana, yo lloré. Yo lloré. Quería que fueses la vencedora por mágica, por angelical, por carismática. Bueno, quedaste subcampeona, que no está nada mal. Eso ya era una gran victoria.
En el último tramo del programa, nos regalaste tus exitosos Arde y Lo malo. Más alegrías y bailes me llevaba gracias a ti. Veía como tu incipiente carrera ascendía después del concurso que te lanzó a la fama. Fuiste imagen de varias marcas, portada de revistas, líder en discos vendidos dentro de tu edición de OT, la más popular en redes sociales... Aitana había ganado el "Post Operación triunfo". ¡Qué bien! ¡“La mía” ganaba por fin!
Ahora, publicas tu primer single después de salir de la academia: Teléfono. Y, con él, haces que vuelva a querer escuchar tu voz a todas horas. Aitana, la chica de moda, el futuro de la música. Estoy seguro de que lograrás muchísimos más triunfos; y no sólo lo deseo en lo profesional, sino también en lo personal. ¿Y sabes qué? Si algún día te caes de la ola exitosa que ahora te impulsa, y te mueve ese divertido flequillo, siempre tendrás un fan que te seguirá allá donde vayas. La gente que me llega, se queda en mí pase lo que pase. Eres verdad y eso se nota. Si viene "lo malo" y tu "teléfono" ya no "arde", aquí estaré yo, más monárquico que nunca, porque tú y sólo tú "siempre reinarás". Ya te lo dijo David Bisbal: eres una princesa. La princesa del pop.
LÁZARO SÁNCHEZ
- Periodista -
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