El humor ácido y la ironía de la narrativa de Eduardo Mendoza alcanza su máximo nivel en Sin noticias de Gurb. Sin ninguna duda, este relato, publicado por entregas en el periódico El País en 1990, es el más excéntrico y disparatado del escritor catalán. Da la sensación de que Mendoza escribe cada línea sobre la marcha, sin ningún tipo de planificación y sin ponerle límites a la imaginación. Y, por imposible que parezca, el resultado es brillante. No estamos ante una gran novela, pero sí ante una historia divertida que deja buen sabor de boca en el lector.
La acción transcurre en la Barcelona pre-olímpica. Los protagonistas son dos extraterrestres que llegan a la Tierra con la misión de conocer nuestro planeta. Uno de ellos, Gurb, desaparece sin dejar rastro. A partir de ese momento, el lector se convierte en testigo de las peripecias que vive el otro alienígena durante la búsqueda de su compañero perdido. Así, desde su óptica vacía de prejuicios y desconocedora de las leyes y normas de conducta autóctonas, el personaje dibuja una caricatura de nuestra sociedad.
Para quien quiera pasar un rato agradable con un libro entre las manos.
Para quien quiera pasar un rato agradable con un libro entre las manos.
"07.00 Cumpliendo órdenes (mías) Gurb se prepara para tomar contacto con las formas de vida (reales y potenciales) de la zona. Como viajamos bajo forma acorpórea (inteligencia pura-actor analítico 4800), dispongo que adopte cuerpo análogo al de los habitantes de la zona. objetivo: no llamar la atención de la fauna autóstona (real y potencial). COnsultado el Catálogo Astral Terrestre Indicativo de Formas Asimilables (CATIFA) elijo para Gurb la apariencia del ser humano denominado Marta Sánchez".
1 comentario:
Madre de Dios!
Suena bien.
Pongo este libro detrás de Cometas en el cielo ;-)
Un abrazo
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